Un resfriado llega cuando una circunstancia o un problema nos ha rebasado y es ya una situación crítica.
Es importante señalar que aunque decimos una “situación” crítica no necesariamente estamos hablando de grandes sufrimientos, sino de circunstancias cotidianas que pueden sacarnos de balance, como puede ser la presión del trabajo, nos referimos a circunstancias que de momento pueden cansarnos, agobiarnos y desear mantenernos lejos de esta situación.
Los resfriados nos ofrecen una gran ventaja (inconscientemente) por un lado el enfermarnos implica el alejarnos de aquello que ya no soportamos, darnos un respiro, pensar en nosotros y por si fuera poco, toda la gente que está a nuestro alrededor se muestra comprensivo con nosotros.
Todos los síntomas que se presentan en el resfriado, tienen una simbología literal:
Dolor de cabeza: Imposible resolver problemas así.
Ojos llorosos: Estamos congestionados o abrumados de la situación.
Sensiblidad en el cuero cabelludo: Nos duele hasta el último pelo, nadie puede tocarnos siquiera.
Nariz tapada: Imposible la comunicación.
Estornudos: Potente arma defensiva para distanciar a la gente.
Garganta irritada: Comunicación y palabra disminuida.
Tos seca: Denota lo áspera de la comunicación con los demás.
Amigdalas inflamadas: Denota la situación que ya no podemos ni tragar.
Dolor en extremidades: Denota la fuerte carga que ya no podemos con su peso.
Mucosidad: Representan la expulsión de nuestros problemas, conforme fluyen nos liberan.
Cada resfriado es todo un proceso de limpieza ya que por medio de él, eliminamos tanto toxinas del cuerpo como emocionales. Una gripa será siempre una crisis de donde saldremos fortalecidos.
Afirmaciones
Resfriados: Doy permiso a mi mente para que se relaje y esté en paz. Hay claridad y armonía en mi interior y a mi alrededor… Todo está bien.
Gripe: Estoy más allá de las creencias de grupos y de las estadísticas. Estoy libre de toda congestión e influencia.